Para El Club del Rock – Tim Drake
Dentro del término Thrash Metal se han apreciado una serie de bandas que no precisamente tienen mucho en común pues varían algunos métodos o detalles que los caracterizan. Bulldozer es una banda italiana que es considerada en el género pero que explota su poder y furia con toques más imponentes que podrían adentrarse en otros derivados del metal.
El show y su set que realizó la banda el 20 de septiembre anterior fue muy de acuerdo al lugar, el Foro Alicia, un show compacto, preciso, conciso, poderoso, legendario y hasta con tintes de nostalgia al recordar el ex bajista de la banda, Dario Carra, a quien le ofrendaron “Willful Death” .
Devil’s Fuel y The Zephyr fueron las bandas teloneras, se puede mencionar que cumplieron, se brindaron, lamentable es que bastante gente se encontraba en el Foro Alicia desde temprano pero no apoyando a las bandas locales y preferían estar fuera fumando o conversando y preparándose solo para Bulldozer.
Poco fue el tiempo de espera para que Bulldozer pisara el escenario y de inmediato la energía que desprendían contagiara al, ahora sí, Foro Alicia incendiado y sobreexcitado. No habían pasado ni cinco canciones para que deleitaran a sus fieles seguidores con “Fallen Angel”, lo suficientemente feroz para desatar los primeros slams y baños de cerveza; inmediatamente la coreada y solicitada “Insurrection of the Living Damned” llenaba la atmósfera de compatibilidad metalera, la serena e hipnótica presencia de AC Wild parecía la de un sacerdote de otro mundo que venía a enseñarle a la tierra otra forma de descifrar el metal, el thrash, etc. La voz que de repente te hacía recordar a Lemmy, una guitarra portentosa y la espectacular forma de ejecutar la batería daban indicios de que estabas en el infierno, con las personas correctas.
La noche siguió con “Ride Hard, Die Fast”, “The Derby” y “Dont Trust the Saint” como los momentos cumbre del show, desatando la locura de hombres y mujeres que ya se habían desbordado para estar muy cerca del escenario y poder estrechar la mano de AC Wild cada que era posible.
Todo era un estado de delirio, un hechizo sonoro por culpa del tipo de capa que estaba sobre el escenario, finalmente, el frontman pudo dar unos segundos de “paz” para recordar a su excompañero Dario y dedicar la mencionada “Willful Death”; lo cual solo sería un preámbulo para retomar el delirio en la multitud y saciar su deseo de escuchar “Whisky Time”. Sin duda la canción más esperada y coreada de la noche.
Parecía que ese sería el cierre perfecto, el climax de una gran noche y sin embargo, Bulldozer no deseó irse sin rendir tributos y dejar deslumbrados a sus seguidores, así que para irse como héroes, la banda se llevó las palmas al interpretar “Iron Fist” de Motörhead, dejando el sentir de una noche memorable y alucinante de ese Thrash Metal que ya no se encuentra tan fácil en las nuevas generaciones.