Quiero ser digno de mirar lo que nadie mira, aquello que merecería ser mirado. Eso que desechan los intelectuales e ignoran los nostálgicos. Nada transitorio, pero tampoco eterno ¿Me dejo entender? … ¿No, no entendiste? ¡No te preocupes! A veces también me cuesta entenderme; sobre todo cuando tengo ganas de escribir.
Si hay algo que me atormenta es pegarme a lo establecido, seguir los pasos que deben ser seguidos para lograr ser alguien medianamente exitoso según la “sociedad” y lo preestablecido; esa misma sociedad que te repudia y crucifica cuando tratas de hacer algo diferente, algo que llame la atención y resulte incómodo para los fundamentalistas. Esta noticia no la levanto porque tenga a Morrissey como protagonista o porque un festival conocido esté involucrado. Mi motivación no pasa por la cantidad de halagos o críticas que reciba en cada artículo que escribo. Mi motivación está muy alejada de toda esa viralidad, tristemente necesaria. Morrissey puede ser un desastre o una maravilla en su profesión, no sé cómo será como persona, desconozco qué tan abierto o cerrado sea en cuanto a su filosofía de vida y sus principios… pero me encanta la gente que se caga en el sistema, me encanta esa gente que deja en claro que no es otro cerebro dedicado a ser idiotizado, como intenta la “sociedad” y sus “medios”. Escribir sobre y para ese tipo de gente es mi más grande motivación, me fascina.
Hace un tiempo fui a comer a un restaurante en el centro de la ciudad, se llama “La casa de la salud”, lugar vegetariano. Llegué ahí por la invitación de una persona para formar parte de un interesante proyecto musical “Toque de queda”, visítenlo. Volviendo al tema vegetariano, nunca antes había ido a un lugar como ése, la verdad que no sentí gran diferencia con un restaurante convencional. Los sabores son casi los mismos, aunque los ingredientes algo diferentes, más sanos… Las ensaladas frescas y la buena salud se sienten en el ambiente. Menciono esto porque hay mucha gente que confunde a los vegetarianos con veganos. Creen erróneamente que te van a dar un pedazo de cereal y lechuga insípida para almorzar y no es así; debemos experimentar cosas nuevas, recuerden que el encadenado solo nota sus cadenas cuando empieza a moverse fuera del lugar de confort.
Dejo en claro que no estoy a favor ni en contra de lo que pide Morrissey, me es indiferente, lo que me motiva a escribir sobre la noticia es que alguien haga todo lo posible por defender sus ideas y principios. No estoy tan interesado en dar detalles exactos de la noticia porque internet es generoso y hay cientos de páginas rebotando la noticia, no me odies; a grandes rasgos, básicamente nos cuenta que Morrissey (reconocido vegano) ha solicitado la prohibición del comercio de carne en el patio de comidas del Festival Vive Latino 2018. Recuerdo vagamente que hizo lo mismo en Islandia e incluso en mi nación (Perú) existió rumores de que haría lo mismo. En mi país canceló el evento por una grave intoxicación:
“No tengo palabras para el dolor que siento por la pérdida del concierto en Perú. Luego de una bienvenida llena de amor en Lima. El mal se iniciaría mediante una simple comida en un restaurante de pastas, en donde pedí penne con salsa de tomate”.
(qué picardía); y en Islandia canceló directamente porque no aceptaron su propuesta en contra del consumo de carnes.
Está claro que Morrisey tiene suficiente espalda como para hacer este tipo de pedidos, pero de todos modos guardo respeto y muestro mi admiración por alguien que defiende sus principios noblemente y que hace caso omiso a lo políticamente correcto. Aplausos por eso, ahora solo queda esperar la respuesta de la productora. No se pierdan el desenlace de esta historia en el próximo capítulo, por la misma página, a la misma hora y escrita por el mismo redactor.
Nota: Hasta el momento no se cuenta con un comunicado oficial por parte de Morrissey, ni de los organizadores que confirme la versión de la petición.