Mi intención nunca es ofender a nadie, es por eso que a veces debo evitar algunas verdades, porque solo traen problemas y quiera o no, acabo ofendiendo a cualquiera que me escuche o lea. La red está llena de gente susceptible y no soy un salmón para ir en contra de la corriente, porque cuando se juntan los histéricos, no los calma nadie. Esta vez debo ser mesurado y consecuente en mi posición frente a la nueva medida que Jack White planea implementar en sus próximos conciertos. Una orden bastante polémica pero que pareciera hacerse imperiosa en estos años en los que la gente prefiere disfrutar de un evento a través de la cámara del celular.
Yo debo ser un joven con alma de viejo porque la verdad me siento desfasado con la realidad en que algunas personas de mi edad viven los conciertos o cualquier tipo de evento masivo. Cada quien paga su entrada para hacer lo que le plazca en su lugar, eso es cierto y debe respetarse. Ahora, ¿No crees que el músico se siente ofendido cuando observa mas ‘flashes’ de cámaras que gente saltando? Repito, tú puedes hacer lo que quieras en tu espacio porque pagaste tu entrada, pero esta postura de la que te hablo es algo más banal, quizá es una postura más romántica y noble ante uno de los fenómenos más grandes de la humanidad como es la música. El fenómeno de las redes sociales ha cambiado terriblemente la conducta de asistentes en los conciertos. Hasta hace un par de años no se le daba mucha bola al celular, no nos interesaba mostrar en tiempo real que estábamos en ‘X’ lugar, en mostrar cómo fuimos vestidos y qué tan cerca o qué tan lejos nos encontramos del artista, en qué marca de cerveza estamos libando; toman una foto y escriben “acabo de llegar al concierto”, luego otra foto y dicen “yéndome del concierto”, tocan su canción favorita y en vez de cantarla a todo pulmón o bailarla, lo graban ¡LO GRABAN Y SE GRABAN CANTÁNDOLO! Yo no lo puedo creer, vieja. Debo ser un loquito nostálgico… Pero bueno, no me quiero desviar del tema. Escribiré sobre esto más adelante, se merece su propio artículo.
Vivimos en una época diferente y parece ser que Jack White se resiste estoicamente a ceder.
Ya en el 2014, Jack había mostrado cierto fastidio por la gente que no disfrutaba los conciertos como él cree que debería disfrutarse. Son pocas las bandas que comparten este tipo de posturas frente a los celulares, iPads y todo tipo de pantallas que reemplazan las cabezas de los asistentes, sí, son pocas… pero son.
Todo esto se da en el lanzamiento de tercer álbum solista, Boarding House Reach. La Gira empezará en Detroit. Ticketmaster es la empresa encargada de vender las entradas, lo curioso es el comunicado que figura en el módulo de ventas.
A continuación la traducción del aviso:
“Este es un show LIBRE DE TELÉFONOS. No se permiten fotos, videos o dispositivos de grabación de audio. Creemos que disfrutarás mirando por encima de tus dispositivos por un momento y experimentando la música y nuestro amor compartido por ella EN PERSONA. Al llegar al recinto, todos los teléfonos y otros artilugios de captura de fotos o video se guardarán en una funda de Yondr que se desbloqueará al final del espectáculo. Tú te quedas con tu teléfono protegido con la funda durante el espectáculo y, de ser necesario, puedes desbloquear tu teléfono en cualquier momento en la Zona Yondr Phone localizada en el lobby y alrededores”.
Bueno, esperemos que lleguen los resultados de este nuevo experimento y que no solo se pueda mantener, sino expandir. Lo bueno se copia. Siempre me había caído bien Jack, ahora me cae mejor. Qué agradable sujeto.