Hammersmith es último sencillo de la banda de hard rock alemana Scorpions, extraído de las canciones extra del último álbum de estudio Rock Believer el 19° en la carrera de la legendaria banda. Hammersmith es considerado, por la misma banda, como un himno a un distrito artístico ubicado en la ciudad londinense y mítico por albergar conciertos de grandes bandas de rock como The Who, Queen, AC/DC, Mötorhead, Metallica y la misma Scorpions.
Así pues, es un manifiesto contemporáneo, que muestra el entusiasmo que aún posee Scorpions por el hard rock, las raíces de su fama y el metal original. Klaus Meine vocalista de la banda, afirma:
“La canción nos lleva a una época en la que tocábamos en los clubes más pequeños, soñando con poder actuar en el Templo del Rock, el Hammersmith Odeon”.
Hammersmith originalmente es un bonus track en la edición del Reino Unido. La canción compuesta por el fundador y guitarrista de Scorpions, Rudolf Schenker, el baterista Mikkey Dee y Magnus Axe, le dan a Meine una gran oportunidad de demostrar que puede dominar con maestría el rock, y no sólo en power ballad, la voz de Kleine es increíble. Con un inicio casi brutal, en el que el gran ex baterista de Mötorhead, Dee ya se esta desahogando, seguido de contundentes riffs de guitarra, son el prologo perfecto para la excursión vocal de Meine.
Hammersmith es algo muy especial en el nuevo repertorio de Scorpions algo íntimo que nos lleva a los inicios de la banda, pero con un nuevo toque contemporáneo que mantiene a la banda de rock alemana vigente para hacer música. Uno de los aspectos más destacados es cuando el guitarrista principal, Matthias Jabs toca magistralmente su instrumento hasta que la canción llega a su final. En palabras del propio Meine “¡Rockea como en el infierno!”.
Rock Believer fue lanzado en febrero de este año, se grabó principalmente en Peppermint Park Studios En Hannover, Alemania, y se mezcló en los estudios Hansa Studios ubicados en la capital Berlín. Scorpions originalmente tenía la intención de grabar su nuevo material discográfico en Los Ángeles con el productor Greg Fidelman, cuyos trabajos anteriores incluyen bandas como Slipknot y Metallica. Sin embargo, los eventos de la pandemia dificultaron la producción del álbum y orilló a Scorpions a trabajar en su natal Alemania.
“El álbum fue compuesto y grabado en el ADN de SCORPIONS con composiciones básicas de Schenker y Meine“, dice Klaus Meine. “Grabamos el álbum como una banda en directo en un local, como lo hicimos en los años 80”.
Si te entusiasma el último álbum de los alemanes, que esperas para seguir rockeando al ritmo de Scorpions.
¿Ya escuchaste Hammesmith?