Desde los años ochenta, cuando formó parte de Deckadas, Carlos Compson entendió que la libertad artística no se negocia. Su carrera ha sido una extensión de esa premisa. A lo largo de cuatro álbumes —Melancolía Inocente, Umbral, El Intermediario y Espuria— ha mantenido el control sobre cada decisión creativa, desde la producción hasta la distribución, sosteniendo una obra ajena a la complacencia y cercana a la integridad. Esa coherencia lo ha convertido en una figura de referencia dentro del rock alternativo latinoamericano.
Su regreso a México con el Tenebris Tour 2025 no solo celebra su vínculo con un público que lo adoptó desde sus primeras visitas, sino también la madurez de una carrera que se sostiene sobre el trabajo independiente. Del 16 al 26 de octubre recorrerá nueve ciudades: León, Saltillo, Monterrey, Durango, Zapotlanejo, Guadalajara, Ciudad de México, Texcoco y Toluca. Cada concierto refuerza la idea de que la autogestión no es un recurso de emergencia, sino una elección que permite sostener una voz fiel a sí misma.

Compson ha levantado un catálogo que respira en los márgenes de la industria, un territorio donde la precariedad convive con la libertad. Su música conecta con quienes entienden que la oscuridad también puede ser una forma de resistencia. En tiempos dominados por la inmediatez y el cálculo, su propuesta ofrece una pausa para escuchar lo esencial, sin ruido alrededor.
El Tenebris Tour México 2025 reafirma que la independencia no está reñida con la expansión. Carlos Compson no solo viaja con sus canciones, sino con una ética que ha resistido modas, algoritmos y ciclos de mercado. Lo suyo es una obra que avanza con pasos firmes, sostenida por una comunidad que reconoce en su persistencia la verdadera forma de la lealtad artística.





